En una ciudad en donde todas las personas son de madera, solo dos cosas son importantes: los puntos grises (para aquellos que siempre quedan en ridículo) y las estrellas doradas (para los más talentosos). Punchinello solo recibe puntos grises, pero un día se da cuenta de que la opinión de los demás no tiene por qué afectar su vida y que siempre va a haber una persona que lo va a apreciar tal cual es. Esta historia nos hace pensar en qué es lo más importante y nos da a conocer el verdadero valor que tiene cada uno de nosotros.