En este devocional, nacido de un corazón que busca a Dios, Finney reta a los cristianos a creer que el poderoso bautismo del Espíritu Santo que se derramó sobre los apóstoles y discípulos el Día de Pentecostés y los revistió con poder para proclamar a Jesucristo al mundo con eficacia, está todavía disponible para nosotros hoy.